jueves, 19 de enero de 2017

En un día como hoy...

Pero en el 2013, Facebook me recuerda que le escribía esto a uno de mis amigos sin etiquetarlo. Como que lanzaba el deseo hacia el universo esperando que se avivara. Tardó pero lo logró. 

Me pregunto cuándo vas a recordar que una sola persona no puede cubrir todos los roles de tu vida. Que tampoco es sano, que todos aportan a que seas lo mejor que podés ser.

Que los buenos amigos no son obviedades y pueden no estar mañana. Que te aman pese a todo, pero no pueden tirar solos del barco de la amistad que comparten; que la reciprocidad es uno de esos remos que los hace seguir avanzando. Y que tienen límites que a veces, si los cruzás, no tienen vuelta atrás. Y tienen todo el derecho de que así sea.

Que las prioridades de tu vida no necesitan ser una pirámide cuyo ladrillo principal sea sólo uno; que siendo generoso e inteligente siempre hay más de vos para compartir con quienes querés y seguir creciendo.

Yo sé que lo sabés. Sólo espero y confío que lo recuerdes.